Chocolate y yogurt...

Esta Semana he realizado un jabón de chocolate y yogurt casero de cabra....

Su Fórmula es la siguiente ...

Aceite de oliva virgen ...... 250gr
Aceite de coco ................. 90gr
Manteca de cacao ............ 38gr
Manteca de karité ............ 25gr
Aceite de almendras ......... 10gr
Aceite de palma ................ 65gr
Aceite de pepita de uva .... 20gr
Aceite de sésamo ............ 15gr

Sobreengrasado ..... 8%
Concentración ...... 28%

Yogurt de cabra .... 175gr
Sosa ........................... 68 gr

Utilicé en esta ocasión cacao puro y Dióxido de Titanio para dar color.

Elaboración:

Bueno, como siempre fue una tarea liosa el hacer un nuevo jabón, pero sí que ya voy cogiendo experiencia jejejeje .. Con mi nuevo molde a estrenar, estaba deseando ver mis pastillas de jabón. Viendo que la tarde que teníamos era bastante lluviosa, nada más entretenido me dije que ponerme al lío jabonoso.. Y tan entretenida que estuve.... Lo menos tres horas entretenida....

Calenté las mantecas y dejé fuera unos 12 gr. de manteca de cacao para el sobreengrasado junto con unos 10 gr. del yogurt. El resto del yogurt lo añadí a la sosa. Que por cierto, como estaba congelado se me puso la sosa sólida en el fondo. Me entró sudores, así que tapé el tarro y agité fuertemente (me acordé del primer jabón, aquél en donde tuve que tirar la sosa y hacerla de nuevo). La solución se me fue poniendo de color amarillo pálido…. Ainssss, que no me va a salir blanco como la nácar… Abrí la tapadera y con mi palillo de brochetas de madera lo fui removiendo hasta que al final todo estaba disuelto. UUUffff..

Al poner al templar las mantecas me di cuenta que no sabía bien la cantidad que tenía que poner de yogurt y cacao en el sobreeengrasado… Así que me puse a hacer las cuentas… Si el sobreeengrasado es del 8 % y de cacao llevo 38 gr. (Ainss, si es que yo siempre fui de letrasss) Pensando yo en cantidades de yogur y de manteca de caco.. que me sobra de aquí que me falta de allá, que no me quiero pasar, que prefiero quedarme corta que ya se sobreengrasará solo…

Antes de comenzar a batir los aceites me cercioré de que todo estaba bien controlado y ahí fue cuando me di cuenta de que había “cosas que faltaban”. No había preparado los colores. Verá… verá como se me vuelve a poner las mantecas duras, con el trabajito que me cuesta sacar el aceite de coco…

A ver, primero el Dióxido de titanio va en una parte para ponerlo blanquito, y luego en la otra el cacao. Así que, como siempre, partí dos botellas de agua para hacer la batienda…

Pero una que es muy despistá, justito cuando comienzo a preparar la traza, me doy cuenta de que no había preparado el molde…. ‘Ay, que mayó estoy ya’ … y tenía que dividir el espacio de éste en dos para poner en cada parte, cada una de las trazas. (mi pensamiento era tras la división por colores, hacerle la técnica de la percha)…. Pero claro… y ¿dónde tengo yo ahora un trozo de algo que me sirva para ello?

Me acordé entonces de que acababa de tirar a la basura una caja de leche vacía, lo malo es que ya había cerrado la bolsa ¡y como la cierro yo! y la había puesto fuera… (Ay Dios, con la ilusión que me hace hacerle un diseño y va y se me olvida prepararlo, si es que no tengo remedio leñe)

Salí corriendo que me las pelaba a abrirla y la joía dichosa, se resistía.. mira, a punto estuve de meterle los dientes y todo para sacar el nudo.… Así que cuando lo logré y vi la caja allí arribita, la atrinqué y con mucha prisita la fregué, hice un rectágulo y a ojo, más o menos, atiné a la largura del mode.

Vuelvo a la traza, que aún estaba muy manejable (menos mal) y tras un batidito, dividí la papilla preparada en los dos culos de botellas, una con el cacao y la otra con el dióxido de titanio.

El aceite me deja la traza muy oscura, pero al batir con el titanio se fue poniendo cada vez más pálida y fue aclarando hasta quedar de un blanco roto. El cacao por el contrario, se puso rápidamente oscuro y me aceleró la traza.

Puse cada color en cada uno de los espacios del molde… ya estaba yo nerviosita perdía y, como no tenía percha, utilicé el mismo palillo de la brocheta, que me hizo las veces de percha… La introduje de forma sesgada e hice mis redondelitos dentro de la masa, repetí varias veces en las distintas partes del bloque…

Lo abrigué y lo guardé bien tapadito hasta el día siguiente…. Ofú, que trabajalera, Vamos, que cada vez que hago jabón se parece más a una peoná en el campo que a un entretenimiento de tarde lluviosa.

En fin, al día siguiente (estaba deseando verlo jejejeje) saqué mi jabón para cortarlo y esto es lo que ha salido..

 

Al pasar los días, cada vez va oliendo más a cacao..